Israel matters: putting the Jewish People Back at the Center of God's Plan

Christian theology of Israel has changed more in the past hundred years than at any other time in the past eighteen hundred. The rise of dispensationalism, the establishment of the State of Israel, and the renewal of Jewish-Christian dialogue in the post-Holocaust era have all informed a modern movement of Christians who are supportive of the Jewish people and the Jewish state.

This movement is not without opposition. The United States in particular is witnessing a renewal of classical Reformed theology, sometimes called Neo-Calvinism. This growing movement, epitomized by popular teachers like John Piper, Tim Keller, and Mark Driscoll, has no place for the Jewish people or the State of Israel in its theology.

In the Reformed paradigm, God has truly promised nothing to the Jewish people; God’s promises throughout the Old Testament are appropriated for the “elect,” a category that now exists within the Christian church. Where Dispensationalists and many Messianic Jews see the State of Israel as the first fruits of a coming fulfillment of God’s promise to end the Jewish exile, Reformed theologians see Israel as nothing more than a political entity—an entity whose very legitimacy these theologians freely, regularly, and publicly attack.

In Israel Matters, the author of Yeshua Matters takes a theology centered on Rabbi Yeshua of Nazareth one step further. Once we realize we are following a practitioner of Judaism, the King of Israel, and the promised Savior of the Jewish people, what happens to our theology of Israel? What part do Jesus’ people, the Jewish people, play—not just in the fulfillment of biblical prophecy, but in God’s continuing work of salvation and redemption?

Not only that—how should the church define itself in the light of Israel’s unique role and calling?

Traducción:

Título en español: Pronunciando al pueblo judío en el centro del plan de Dios

La teología cristiana de Israel ha cambiado más en los últimos cien años que en cualquier otro momento en los últimos mil ochocientos. El surgimiento del dispensacionalismo, el establecimiento del Estado de Israel y la renovación del diálogo judeo-cristiano en la era posterior al Holocausto han informado a un movimiento moderno de cristianos que apoyan al pueblo judío y al estado judío.

Este movimiento no está exento de oposición. Los Estados Unidos en particular están presenciando una renovación de la teología reformada clásica, a veces llamada neocalvinismo. Este movimiento creciente, personificado por maestros populares como John Piper, Tim Keller y Mark Driscoll, no tiene lugar para el pueblo judío o el Estado de Israel en su teología.

En el paradigma reformado, Dios realmente no ha prometido nada al pueblo judío; Las promesas de Dios en todo el Antiguo Testamento son apropiadas para los "elegidos", una categoría que ahora existe dentro de la iglesia cristiana, donde los dispensacionalistas y muchos judíos mesiánicos ven al Estado de Israel como los primeros frutos de un próximo cumplimiento de la promesa de Dios de terminar con el exilio judío, los teólogos reformados ven a Israel como nada más que una entidad política, una entidad cuya legitimidad estos teólogos libremente, regularmente y atacar públicamente.

En Israel Matters, el autor de Yeshua Matters lleva una teología centrada en el Rabino Yeshua de Nazaret un paso más allá. Una vez que nos damos cuenta de que estamos siguiendo a un practicante del judaísmo, el Rey de Israel y el Salvador prometido del pueblo judío, ¿qué sucede con nuestra teología de Israel? ¿Qué papel juega el pueblo de Jesús, el pueblo judío, no solo en el cumplimiento de la profecía bíblica, sino en la obra continua de salvación y redención de Dios?

No solo eso: ¿cómo debe definirse la iglesia a la luz del papel y el llamado únicos de Israel?